El pasado 28 de abril, España vivió una situación alarmante cuando un apagón generalizado afectó a diversas zonas del país, poniendo en jaque no solo los servicios básicos como la electricidad, sino también el suministro de agua potable. Aunque el apagón fue de varias horas, muchas personas se preguntaron: ¿Cómo afectaría esto al agua potable? ¿Durante cuánto tiempo seguiríamos teniendo acceso al agua si las plantas potabilizadoras y depuradoras de agua se detuvieran?
Analizamos qué sucede cuando los sistemas que gestionan el tratamiento y distribución del agua se ven interrumpidos por un apagón, y cómo gestionan las autoridades este tipo de emergencias.
Qué pasa si hay un apagón prolongado en las plantas depuradoras
Las plantas de tratamiento de agua, también conocidas como depuradoras o plantas potabilizadoras, son responsables de garantizar que el agua que llega a nuestros hogares sea segura y apta para el consumo. Para lograr esto, las plantas realizan una serie de procesos complejos que incluyen la coagulación, floculación, sedimentación, filtración y desinfección del agua, utilizando electricidad para hacer funcionar bombas, filtros, sistemas de control y desinfectantes.
Las plantas potabilizadoras y depuradoras necesitan electricidad para captar el agua de ríos, embalses o acuíferos y para bombearla hacia los sistemas de tratamiento. Si las instalaciones se quedan sin electricidad, el proceso de captación y transporte de agua se interrumpe, lo que puede llevar a un déficit de suministro.
En los primeros momentos del apagón, el suministro de agua potable puede seguir funcionando gracias a los depósitos de almacenamiento que las plantas tienen en reserva. Estos depósitos almacenan agua tratada para situaciones de emergencia. Sin embargo, esta agua es limitada y podría agotarse si el apagón se prolonga más de unas horas. La duración de este suministro dependerá de la cantidad de agua almacenada y la capacidad de distribución de la red.
Durante cuánto tiempo seguiríamos teniendo agua potable
La respuesta a esta pregunta depende de varios factores, como la duración del apagón y las características específicas de las plantas potabilizadoras y los sistemas de almacenamiento. En general, durante las primeras horas de un apagón, el suministro de agua potable seguiría funcionando gracias a los tanques de almacenamiento y la presión residual en las tuberías. Sin embargo, si el apagón dura más tiempo y las plantas depuradoras no pueden reactivarse rápidamente, el suministro comenzaría a verse afectado.
Por lo tanto, en caso de un apagón prolongado, el tiempo en el que seguiríamos teniendo agua potable dependería de lo siguiente:
- El volumen de agua almacenada en los depósitos de la planta.
- El tipo de red de distribución y si es capaz de mantener la presión sin necesidad de bombas.
- La rapidez con la que se reanude el suministro eléctrico y se reactive la planta potabilizadora.
En ciudades más grandes como Madrid, con una mayor capacidad de almacenamiento y una red de distribución bien diseñada, los depósitos podrían durar entre 24 y 48 horas en circunstancias normales.
Qué hacer en caso de no disponer de agua potable
Tener agua potable almacenada en casa es fundamental para cualquier emergencia. La cantidad de agua que debes almacenar depende de varios factores, como el número de personas en el hogar y la duración de la emergencia. La Cruz Roja recomienda que cada persona tenga un suministro mínimo de 2 litros de agua por día para beber y para uso en la cocina. Para una emergencia, deberías almacenar al menos una reservas para 3 días. Esto se traduce en: 6 litros de agua por persona para un suministro básico de 3 días.
Además de los 2 litros recomendados para beber y cocinar, es útil tener agua extra para higiene personal, limpieza y otros usos no esenciales. Para esto, se estima que otros 2-3 litros por persona al día pueden ser necesarios, especialmente si no tienes acceso a una fuente alternativa de agua (como agua de lluvia o un pozo).